Introducción para leer todo lo demás...
Internet, software empaquetado, plantillas prediseñadas, redefiniciones en el derecho, y muchos otros avances en la disponibilidad del conocimiento, han producido dos alter-egos en el mundo de la experticia profesional:
De un lado, todas esas herramientas ofrecen a un profesional multiplicar varias veces su y especialización, eficacia y eficiencia, amén de contar con los últimos avances del conocimiento casi en el momento mismo que se producen.
Por otro lado, un alter-ego con todo lo contrario: las mismas tecnologías han hecho que hoy cualquier amateur pose de experto.
Posiblemente mucho de lo que vean aquí pueda sonarles similar o equivalente a otras firmas y otras páginas WEB; soluciones con títulos parecidos o idénticos, descripciones similares y -ésta es mi favorita- todos ofreciendo servicios "según los más altos estándares internacionales".
Qué se le va a hacer: cuando algo tan grande y tan nuevo entra a un mercado que está completamente desnudo para afrontar las nuevas exigencias de profesionalización, es ineludible que ocurra exactamente lo que en Chile con el tema de compliance y modelos de prevención de la responsabilidad penal de la empresa: por un lado, hay una nueva vaca para ordeñar... surgen oferentes debajo de cada piedra -básicamente auditores y abogados- para quienes es un nuevo nicho de negocios e ingresos (sin importar si auditores y abogados saben realmente "segun los más altos estándares...", o siquiera los más mínimos).
Y, por su parte, las empresas -Gerentes, Directores, RRHH- no han tenido todavía ni el tiempo ni la experiencia para poder distinguir la calidad de la oferta -particularmente en un escenario, como el Chileno, que, tras una larga historia de tabú en esta área, hoy se encuentra con que casi no hay profesionales especializados en esta área, que esto es mucho más que nuevas normas para abogados o metodologías para auditores, o peor, no se dan cuenta ni de lo uno ni de lo otro y, como ocurre hoy, les venden cualquier baratija como si fuera una joya.
En parte por eso, en parte por nuestra oferta, hemos creído imprescindible ofrecer algunas ideas-fuerza generales sobre que reposan todos nuestras soluciones.
1) Sí existe una gran diferencia entre "los mejores estándares internacionales", "las mejores prácticas comparadas" -o cualquier otra expresión que refleje los últimos 30 años de tecnología 'evidence-based'-, y el resto de las ocurrencias que a abogados, auditores y otros se les puedan ocurrir, creativas o mediocres. En la era de Internet, donde cualquier escolar puede 'copiar y pegar' el diseño de una bomba atómica, nuestra firma trabaja sólo con lo mejor de la experticia desarrollada en los últimos 30 años, y -aquí viene la diferencia- podemos y estamos deseosos de probarlo.
2) Producir valor real para la empresa y aportar a su competitividad está a la base y es una prioridad estratégica en todo y cada uno de nuestros productos.
3) No ofrecemos lo que no sabemos, ni lo que no podemos razonablemente entregar.
4) En un área donde las metodologías tradicionales sientan a los abogados detrás de los escritorios, y hacen de los auditores a la revisión financiera, nuestros servicios incluyen todas las herramientas forenses y operativas propias de una investigación compleja. Siempre dentro de la ley, pero de una ley que, en nuestro mejor conocimiento profesional, ofrece a los servicios privados, como los nuestros, incluso más posibilidades que las que las visiones más conservadoras pretenden reservar sólo para fiscales, policías, y órganos del Estado.
De un lado, todas esas herramientas ofrecen a un profesional multiplicar varias veces su y especialización, eficacia y eficiencia, amén de contar con los últimos avances del conocimiento casi en el momento mismo que se producen.
Por otro lado, un alter-ego con todo lo contrario: las mismas tecnologías han hecho que hoy cualquier amateur pose de experto.
Posiblemente mucho de lo que vean aquí pueda sonarles similar o equivalente a otras firmas y otras páginas WEB; soluciones con títulos parecidos o idénticos, descripciones similares y -ésta es mi favorita- todos ofreciendo servicios "según los más altos estándares internacionales".
Qué se le va a hacer: cuando algo tan grande y tan nuevo entra a un mercado que está completamente desnudo para afrontar las nuevas exigencias de profesionalización, es ineludible que ocurra exactamente lo que en Chile con el tema de compliance y modelos de prevención de la responsabilidad penal de la empresa: por un lado, hay una nueva vaca para ordeñar... surgen oferentes debajo de cada piedra -básicamente auditores y abogados- para quienes es un nuevo nicho de negocios e ingresos (sin importar si auditores y abogados saben realmente "segun los más altos estándares...", o siquiera los más mínimos).
Y, por su parte, las empresas -Gerentes, Directores, RRHH- no han tenido todavía ni el tiempo ni la experiencia para poder distinguir la calidad de la oferta -particularmente en un escenario, como el Chileno, que, tras una larga historia de tabú en esta área, hoy se encuentra con que casi no hay profesionales especializados en esta área, que esto es mucho más que nuevas normas para abogados o metodologías para auditores, o peor, no se dan cuenta ni de lo uno ni de lo otro y, como ocurre hoy, les venden cualquier baratija como si fuera una joya.
En parte por eso, en parte por nuestra oferta, hemos creído imprescindible ofrecer algunas ideas-fuerza generales sobre que reposan todos nuestras soluciones.
1) Sí existe una gran diferencia entre "los mejores estándares internacionales", "las mejores prácticas comparadas" -o cualquier otra expresión que refleje los últimos 30 años de tecnología 'evidence-based'-, y el resto de las ocurrencias que a abogados, auditores y otros se les puedan ocurrir, creativas o mediocres. En la era de Internet, donde cualquier escolar puede 'copiar y pegar' el diseño de una bomba atómica, nuestra firma trabaja sólo con lo mejor de la experticia desarrollada en los últimos 30 años, y -aquí viene la diferencia- podemos y estamos deseosos de probarlo.
2) Producir valor real para la empresa y aportar a su competitividad está a la base y es una prioridad estratégica en todo y cada uno de nuestros productos.
3) No ofrecemos lo que no sabemos, ni lo que no podemos razonablemente entregar.
4) En un área donde las metodologías tradicionales sientan a los abogados detrás de los escritorios, y hacen de los auditores a la revisión financiera, nuestros servicios incluyen todas las herramientas forenses y operativas propias de una investigación compleja. Siempre dentro de la ley, pero de una ley que, en nuestro mejor conocimiento profesional, ofrece a los servicios privados, como los nuestros, incluso más posibilidades que las que las visiones más conservadoras pretenden reservar sólo para fiscales, policías, y órganos del Estado.